lunes, 25 de mayo de 2015

La pasión

La pasión crea el camino con alegría. Promueve, y a la vez, vive de las ideas, y nos impulsa cuando estamos indecisos.

Aviva la fuerza de voluntad y alivia los temores. Por ello, te mantienes atento y tus límites no son barreras infranqueables, más que cuando tú respetas que lo son.

Impulsa la persistencia y por ello, la pasión se transforma y se materializa. Mantiene controlada a la tristeza, en su punto justo. 

Se acompasa con la respiración, en la búsqueda de la verdad, alumbrando el camino de la alegría y de la compasión.

La pasión en lo que haces, en lo que eres o vives, es tu motor, es tu corazón.

Cuando la vida apaga la pasión, respira profundamente, siente tus latidos y sonríe. Busca dentro de ti y mira las maravillas de la vida que siempre han estado. Mira a tu alrededor y busca las maravillas de la vida que siempre han estado. 

Vive.